jueves, 10 de diciembre de 2009

LA REFORMA I


Hebreos 10:9 "El quita lo primero para establecer lo segundo"
Son otros tiempos, minutos últimos de corrupción, segundos terminales de pecado y perdición. La batalla se hace cada vez mas fuerte para aquellos que decidieron seguir a aquel cuyo nombre es sobre todo nombre, Jesús de Nazaret, “porque estos son días de venganza, para que se cumplan todas las cosas que están escritas” (Lucas 21:22). Pero así también son otras generaciones las que viven el mundo, las que se levantan. Prepárense para la Gran Revolución, la peor pesadilla del infierno, los más buscados por los poderes de las tinieblas. Se preguntaron entonces: dónde están los Elías, los Daniel, los Moisés, los Nehemías. “En efecto, toda la creación espera ansiosamente esta revelación de los hijos de Dios.” (Romanos 8:19). No es nada normal lo que esperamos, lo que ha de venir es fuego, avivamiento y juicio, poder del Espíritu, convicción de pecado, y será posible solo en la reforma. La reforma no es más que un cambio que se hace para mejorar. Etimológicamente se refiere a volver a dar forma a algo. Nuestras mentes necesitan ser reformadas, renovadas. Necesitamos ser nuevos cada día. Pablo dijo en su carta a los efesios (4:22-23): “En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente”. En definitiva Pablo no se refiere a ser renovados un solo día, la renovación es constante.

No hay comentarios: